«Una enfermera que fue suspendida por una clínica de la región de Lyon por no vacunar contra el Covid va a recibir una medalla de trabajo de su empleador por sus 20 años de servicio, informa el viernes Le Progrès.
Esta enfermera de 46 años, residente en la región del Loira, fue suspendida a mediados de septiembre por la dirección de una clínica de Caluire-et-Cuire, en aplicación de la ley del 5 de agosto relativa a la vacunación obligatoria del personal sanitario.
La enfermera espera recibir su recompensa
Sin embargo, hace poco recibió una carta de su empleador en la que la invitaba a una velada el 19 de noviembre «con una medalla de reconocimiento a su trabajo» y a su «vinculación» con la Enfermería Protestante -nombre de la clínica- de la que es empleada desde 2001. «Me pregunté si debía reír o llorar por ello. Me dije: no, es mejor reírse de ello. Es como el 1 de abril», dijo la enfermera, que no había pedido la medalla.
La enfermera, que se gana la vida como temporera desde su suspensión, tiene la intención de cumplir la invitación, que según ella no especifica si el pase sanitario es obligatorio. Con «un bonito discurso» sobre lo que piensa de la situación.
