El servicio de inteligencia alemán (BND) ha grabado comunicaciones de radio de soldados rusos en las que hablan de los abusos cometidos en Boutcha, al noroeste de Kiev (Ucrania), donde se han descubierto decenas de cadáveres, lo que ha desatado la indignación, según la revista Der Spiegel. El contenido de algunos de los intercambios corresponde a las fotos de los cadáveres encontrados en Boutcha, que han provocado una ola de condenas internacionales, con varios dirigentes, entre ellos el alemán Olaf Scholz, refiriéndose a los «crímenes de guerra» perpetrados por los rusos en esta localidad tomada por las fuerzas ucranianas, según la misma fuente.
Grabaciones que contradicen la versión rusa
Los funcionarios del BND han informado a los diputados de las conversaciones interceptadas, dice Der Spiegelpara quien estas grabaciones contradicen la versión de Moscú de que los cuerpos de personas vestidas de civil encontrados en Boutcha fueron colocados allí después de que las tropas rusas hubieran evacuado la zona.
Por ejemplo, en uno de los mensajes de radio mencionados por der Spiegel, un soldado explica a otro que él y sus compañeros dispararon a una persona en bicicleta. La foto de un cadáver tumbado en su bicicleta se hizo viral y los periodistas de la AFP vieron este cuerpo y los de una veintena de hombres vestidos de paisano mientras recorrían una de las calles más largas de Butcha.
Los mercenarios de Wagner supuestamente participaron en los abusos
En otro mensaje de radio, un hombre dice: «Primero se interroga a los soldados, luego se les dispara. Estos mensajes también confirman que mercenarios rusos del grupo Wagner en Ucrania estuvieron involucrados en los abusos, dijo la revista. «Los soldados hablaron de las atrocidades como parte de su vida cotidiana», escribe, asegurando que las ejecuciones no fueron cometidas accidentalmente por soldados rusos que actuaron sin órdenes. Estos resultados no se limitan a Butcha. En Motijine, a 50 kilómetros al oeste de Kiev, la AFP vio cuatro cuerpos semienterrados en una fosa excavada en el bosque. Entre ellos estaban la alcaldesa de este pueblo, su marido y su hijo, que habían desaparecido.
El gobierno alemán dijo el miércoles que la posición rusa de que las muertes de civiles fueron escenificadas era «insostenible» a la luz de las imágenes de satélite que se han publicado. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, calificó las matanzas de «los peores crímenes de guerra» desde la Segunda Guerra Mundial y de «genocidio». Occidente ha anunciado un refuerzo de las sanciones contra Moscú.