El actor Alec Baldwin estaba practicando cómo desenfundar su pistola y apuntar a la cámara cuando un director de fotografía recibió un disparo mortal durante el rodaje de una película en Estados Unidos, según documentos judiciales citados el lunes por los medios de comunicación estadounidenses.
El «sonido de un látigo, y un gran ‘bang'»
El director Joel Souza, que recibió un disparo en el hombro, se encontraba detrás de la víctima Halyna Hutchins. Dijo que escuchó lo que sonó como «un látigo y un gran estallido», según un informe de investigación preliminar obtenido por la NBC. «Alec (Baldwin) estaba sentado en un banco de la iglesia, practicando su dibujo», decía el documento. El director miraba por encima del hombro de Halyna Hutchins.
Después de la toma, la cineasta «le agarró el abdomen», dijo el director, añadiendo que «empezó a tropezar hacia atrás» y fue «ayudada a caer al suelo». El camarógrafo Reid Russell dijo que la escena no fue filmada mientras el equipo se preparaba para rodar. El equipo de la película «Rust», de Nuevo México, acababa de regresar de una pausa para comer, y Joel Souza dijo que «no estaba seguro» de si el arma había sido revisada.
Un accidente que conmocionó profundamente al mundo del cine
Halyna Hutchins, de 42 años, recibió un disparo en el torso el jueves después de que Alec Baldwin disparara una pistola como atrezzo, un raro y trágico accidente que conmocionó al mundo del cine. Fue declarada muerta horas después. Se está llevando a cabo una investigación policial y Baldwin ha sido entrevistado. Todavía no se han realizado detenciones. El domingo se celebró una vigilia en Burbank, cerca de Los Ángeles, en honor a Halyna Hutchins. El ambiente era de amargura y tristeza, ya que la gente quería saber cómo era posible semejante tragedia.
Una petición en el sitio web change.org, en la que se pide la prohibición de las armas de fuego reales en los platós de rodaje y la mejora de las condiciones de trabajo de los equipos, había recogido hasta el lunes más de 24.000 firmas.